El secretario de Políticas Universitarias, Alberto Dibbern (foto), se manifestó en contra de establecer cupos para limitar el ingreso a las carreras con mayor cantidad de inscriptos, aunque admitió que "es necesario orientar a los jóvenes, sin desoír la vocación de cada uno", para que se capacite en aquello que el país necesita. Al visitar ayer la Universidad Nacional de Lomas de Zamora, donde recorrió el Laboratorio de Medios, Dibbern manifestó que una de las prioridades en los próximos años es formar doctores "para que una vez formados vuelvan a colaborar con el progreso de su región de origen". En este sentido, explicó que el objetivo es "contar con grupos de excelencia en disciplinas que tiendan a fomentar el desarrollo regional". Dibbern asumió en el cargo el 18 de agosto último, "con la expectativa de elaborar políticas destinadas a mejorar la calidadde las carreras, especialmente las que cuentan con acreditación", según explicó. "Especialmente queremos prestarle atención a las que la Ley de Educación Superior refiere en su artículo 43, que son aquellas para las que la norma establece estándares de calidad", sostuvo. No obstante, aclaró que pretende que "no se cree un desequilibrio en el sistema universitario a través de un programa que atienda al mejoramiento de las carreras incluidas en elartículo 42". La diferencia entre ambos conjuntos de carreras es que las primeras son aquellas que se consideran que afectan al bien común, como Medicina, Ingeniería, Agronomía y Farmacia, entre otras. En cambio, en el otro grupo aparecen carreras en las que el Estado no establece demasiadas condiciones "y el requisito para otorgar un título de validez nacional es prácticamente que cumplancon una determinada carga horaria más que con estándares propiosde calidad", señaló