
La CIC y la Unicen -conjuntamente con una empresa privada del interior- se encuentran desarrollando los detalles para sacar al mercado una fertilizadora inteligente que, según estiman, permitirá reducir costos en el insumo, que representa una de las porciones más importantes del presupuesto de siembra. La máquina en cuestión podrá "leer" e "interpretar", según el color de las plantas, la dosis justa -en tiempo real- que requiere el cultivo y de esa manera evitar el derroche propio de una fertilización tradicional, que distribuye en todo el campo la misma cantidad de fertilizante.
El titular de la Comisión provincial Néstor Auza dijo a Universidata que este "es un proyecto original, porque se crea completamente en el país".